Se afirmó que el día de la raza era un hipocresía porque supuestamente servía para conmemorar la comunión de distintas razas cuando el español llegó y acabó con la cultura aquì existente. Eso es cierto. Entonces le pusieron "Día del Respeto a la Diversidad Cultural" para recordar y reflexionar sobre como los españoles no respetaron la diversidad cultural y destruyeron la cultura de los pueblos originarios; lo que está muy bien. La historia oficial dice que los "pueblos originarios" eran seres puros e inocentes que fueron víctimas de los españoles. Esto último es cierto. Pero lo primero no tanto.
Los mismos Aimaras que hoy se ponen en víctimas y reclaman derechos y tierras expropiadas por los invasores, fueron en su momento también invasores que quitaron derechos, tomaron tierras y destruyeron culturas de pueblos originarios argentinos.Dice Wikipedia sobre los aborígenes argentinos:
"Los distintos grupos étnicos que habitaron la región andina fueron los omaguacas, atacamas, diaguitas y huarpes. El territorio del departamenteo de Los Andes antes de la invasión quechua ("inca") estaba habitado por los Atacamas quienes llegaron a construir la urbe antigua más populosa en el actual territorio de la República Argentina: Tastil en la Quebrada del Toro, pero tal urbe fue destruida por los Incas y Aimaras; poco después de la incursión inca-quechua (en la cual participaron como aliados de los quechuas aimaras procedentes del norte de la actual Bolivia)."
¿Y que hicieron tras la conquista? EXACTAMENTE LO MISMO QUE LOS ESPAÑOLES: someter a los pueblos originarios, esclavizarlos, asesinar o destarrar a los rebeldes, saquear los recursos naturales, imponer su cultura, destruir la anterior y discriminar y tratar como inferiores a los pueblos menos avanzados. Unos hijos de puta.
"Aprovechando la debilidad de las etnias existentes se produce la irrupción de los incas y la anexión de la mayor parte del territorio al "Tucumán" del Tawantinsuyu, el dominio Inca fue breve por la llegada de los españoles, aunque dejó algunos notorios rastros culturales: extracción de los recursos naturales para transportarlos al centro de su imperio, para esto se creó el sistema de pistas llamado Kapak Ñan (literalmente "Gran camino" usualmente conocido como "Camino del inca) y se estableció la imposición de la prestación personal entre los sometidos (la mita si la sumisión era relativamente pacífica, o el yanaconazgo y deportaciones para los más rebeldes) acompañado con establecimiento de depósitos como collcas, y tambos, la demolición de las fortalezas preincáicas y la construcción de nuevas fortalezas en función a las necesidades imperiales (los pucaras) , el desarraigo de etnias que opusieron resistencia tal cual se verifica en el despoblamiento de Tastil, deportación de mitakuna (mitimaes) desde regiones septentrionales, practica de sacrificios humanos en las cumbres de las montañas tal como se verifica en el Volcán Llullaillaco, incluso la destrucción de los cementerios de los pueblos "diaguitas" (palabra cuyo significado proviene de la aimara thyakita = "lejanos" — en relación al Cusco o a Tiwanaku — ) para provocar una amnesia histórica ya que la mayoría de los pueblos originarios del NOA rendían culto a sus antepasados; los incas substituyeron tales sistemas de creencias por una religión de estado en la cual la casta inca era homologada al sol lo cual les permitía racionalizar el control y enajenación de los recursos económicos regionales: 1/3 de lo producido era para el inca, otro tercio para Inti o dios-sol y solo otro tercio quedaba para las poblaciones productoras. La parte oriental de las actuales provincias de Salta, Tucumán y casi todo el territorio de Santiago del Estero se mantuvo independiente de los incas efectuando las etnias de esa zona (vilelas, lules, toconotés, wichis etc.) frecuentes incursiones sobre las zonas controladas por los incas. Los lules y toconotés fueron llamados despectivamente "surí" (luego transliterado al español como xurí y jurí), los wichi fueron motejados de "matacos" otros pueblos chaquenses de "cuncos" y "chavancos" por los invasores quechuas y sus aliados aymaras."
Los mismos Aymaras que hoy se quejan cuando los discriminan como bolitas, discriminaban y trataban de "matacos" a los pobres wichis. Y no solo los Incas y Aymaras atacaron pueblos originarios argentinos, los Mapuches libraron sangrientas batallas de conquista contra los habitantes originales de nuestras tierras.
"Históricamente los mapuches se encontraban asentados entre los ríos Itata y Toltén, en Chile.Hacia principios del siglo XIX se libraron encarnizados combates entre patagones y mapuches a orillas del río Senguerr o Gengel, siendo aún recordada por los mapuches la Batalla de Languiñeo; otros combates se produjeron en Barrancas Blancas y Shótel Káike. En 1821 un ejército mapuche apoyado por milicias chilenas, derrotó en los Vados de Choele Choel a 1800 pampas serranos y a sus caciques Ojo Lindo y Anapilco9 A partir de ese año la ocupación mapuche formó una «cuña» entre los tehuelches; uno se vieron desplazados hacia el sur del río Negro y otros buscaron refugio en el interior de la Provincia de Buenos Aires"
Basta ver el nombre del pueblo mas importante del sur de nuestro país, los Tehuelches. Este nombre en lengua Mapuche significa "gente bravía". Se lo dieron los Mapuche por su bravura en la guerra, resistiendose a su invasion del siglo XVI. Para antropólogos e historiadores como Rodolfo Casamiquela (experto en la cultura patagona), se trató de una invasión en que los mapuches casi extinguieron a los tehuelches por medio de la violencia (aunque el consenso actual mapuche es que se trató de un fenómeno más complejo que eso).
Pero no solo los Mapuches transaban con ejércitos como el chileno para perseguir a otros pueblos en beneficios propio. Los Tehuelches terminan de ser mancillados por una alianza entre distintas tribus y militantes realistas, que asesinaban a sus "hermanos latinos" a cambio de tierras y dinero. Igualito que los señores feudales y sus ejercitos.
No olvidemos que las costumbres de los pueblos originarios eran tan repudiables como las de los europeos, siendo tradicional el sacrificio ritual de niños y jovenes virgenes. Tribus como los Aztecas eran temidas por su comportamiento sanguinario, torturando y sacrificando a sus prisioneros:
"Subían al prisionero hasta la «Piedra de los Sacrificios» del templo (llamada techcath), donde cuatro sacerdotes lo tumbaban, estiraban y sujetaban. Después le extraían el corazón con el cuchillo, levantando la masa sanguinolenta al aire mientras pronunciaban la ofrenda suprema a Tonatiuh, el dios del Sol. El corazón se guardaba en una vasija especial, llamada cuauxicalli, tallada con diseños que representaban un águila, mientras que el cuerpo era arrojado por las escaleras del templo. Los españoles prohibieron estas practicas tras la conquista del Imperio Azteca en 1521."
Demás está decir que con esto no estoy diciendo que lo que hicieron los españoles está bien, porque fue un genocidio inaceptable. Lo que digo es que los "pueblos originarios" tampoco eran ningunos santos, le hicieron a otros lo que los españoles le hicieron a ellos. Si hubieran tenido la posibilidad seguramente hubieran conquistado España, destruido su cultura y robado sus rirquezas. Son unos hipocritas los que hoy lloran como víctimas cuando fueron victimarios. No estoy descubriendo la pólvora si digo que los aborígenes eran seres humanos y en su caracter de tal eran asesinos, ventajeros y corruptos. Es la condición humana, ya lo dijo el loco Hobbes, el hombre es lobo del hombre, seas indio o alemán, en el estado de naturaleza sos un hijo de puta que necesita que inventen los derechos humanos y los pongan por escrito para que no sometas al que tenés al lado. Entonces no me vengan con cara de pobrecito a decirme "indio bueno, español malo", porque la realidad es que son todos humanos y todos malos. Eran los capos del barrio que se la ponían a todos lo que podían, después viene uno mas capo y se la ponen a ellos y ahí lloran y gritan "injusticia"? Caraduras! A los pueblos originarios hay que respetaros y asegurarle condiciones de vida digna porque son seres humanos; pero no merecen ningún trato preferencial por haber perdido un juego al que disfrutaban jugar mientras ganaban.